La medida que llevaba tiempo en la agenda política ya ha sido aprobada por el Consejo de Ministros: la jornada laboral en España se reducirá de 40 a 37,5 horas semanales sin que esto afecte al salario. Tras meses de negociaciones, el proyecto de ley inicia ahora su trámite parlamentario y, aunque no será inmediato, ya hay un calendario claro.
El texto aprobado no será un decreto, sino un proyecto de ley, lo que implica un debate más largo pero también más abierto a cambios en el Congreso y Senado. La intención es que las empresas puedan adaptarse con margen suficiente. De hecho, se ha fijado el 31 de diciembre de 2025 como fecha límite para que todos los convenios colectivos se ajusten a la nueva jornada, siempre que superen las 37,5 horas en media anual.
Aunque no hay una fecha oficial de entrada en vigor, si los trámites avanzan según lo previsto, la nueva jornada comenzará a aplicarse durante el segundo semestre de 2025.
¿A cuántos trabajadores beneficiará esta medida?
El alcance de la reforma es muy amplio y afectará directamente a millones de trabajadores. Según el Ministerio de Trabajo, más de 12,5 millones de personas verán reducida su jornada laboral. Los sectores más afectados por este cambio serán:
Sector | Trabajadores afectados |
---|---|
Comercio | 2,4 millones |
Industria | 2 millones |
Hostelería | 1,4 millones |
Construcción | 1 millón |
Además, aquellos convenios que ya contemplan jornadas inferiores no se verán afectados negativamente, ya que la nueva norma actúa como límite máximo, pero no impide mejoras adicionales.
Registro horario digital obligatorio: uno de los pilares clave de la reforma
Uno de los aspectos más relevantes de esta medida es que no solo cambia la duración de la jornada, sino también la forma en que se controla. Todas las empresas deberán tener un registro digital de la jornada laboral, accesible en tiempo real para la Inspección de Trabajo.
Los trabajadores deberán registrar su entrada y salida de forma personal, legible y verificable. El objetivo es evitar fraudes o manipulaciones del horario.
Además, se refuerza el derecho a la desconexión digital, lo que significa que ningún trabajador podrá ser sancionado por no responder mensajes, correos o llamadas fuera de su horario. El tiempo libre deberá ser respetado de forma real, no solo sobre el papel.
¿Qué pasa si una empresa no se adapta a tiempo?
El Gobierno ha dejado claro que habrá margen para adaptarse, pero también consecuencias claras si no se cumple la normativa. Las empresas que incumplan las nuevas obligaciones podrán ser sancionadas con multas de hasta 10.000 euros por trabajador afectado.
Para evitar problemas, las empresas deberán:
- Ajustar sus jornadas laborales antes del 31 de diciembre de 2025.
- Implementar un sistema de registro horario digital.
- Garantizar el derecho efectivo a la desconexión digital.
- Actualizar sus políticas internas y convenios si es necesario.